Un Latte macchiato y un muffin de frambuesa por favor (Vincent)

por **Miranda Halliwell** Dom Nov 14, 2010 11:02 pm

Era uno de esos días en los cuales me daban mis odiosos antojos, me ponía algo...me corrijo, bastante selectiva a la hora de comer algo. En casa, no había nada que me gustara para comer así que decidí ir a Starbucks para comprar algo, además mis hermanos no estaban en casa así que no tenía muchas ganas de comer sola.

Entré al lugar, por algún motivo en particular, no estaba muy repleto que digamos, eso era bastante extraño, ya que normalmente ese café estaba lleno a casi todas horas, alcé los hombros despreocupada, mejor para mí, así no tendría problema para encontrar un lugar donde sentarme.

Me dirigí a la caja, -Quiero un Latte macchiato y un muffin de frambuesa por favor- dije amablemente a la chica que estaba atendiendo, le entregué el dinero para pagar y le pedí que se quedara con el cambio, el cuál no era mucho, no quería guardar monedas en mi cartera.

A los pocos minutos, estaba sentada en una mesa tomando mi café con calma, no tenía quien me apurara, me encantaba esa sensación de tener tiempo libre. Sobre la mesa había un periódico de hoy, miré a mi alrededor, suponía que la persona que había estado sentada allí lo había olvidado. Lo tomé para leer algunas noticias, si, estaba tan ociosa que leía las noticias.

por **Vincent Hewitt** Dom Nov 14, 2010 11:29 pm

Ya ha comido. Nada complicado, ha horneado una pizza y se la ha zampado en cosa de veinte minutos. Luego, como siempre, se ha ido a tomar un café mokka al Starbucks, pillando por el camino el periódico del día y sentándose a leer alguna noticia mientras toma el susodicho y, de paso, hacer el sudoku.

El caso es que se fue al baño, tiró el vaso a la papelera y se largó. Y a medio camino de irse a vete tú a saber dónde, se acuerda del periódico, el sudoku a medio hacer. A Vinz no le gusta dejar las cosas a medias, ni siquiera un maldito sudoku, así que da media vuelta y desanda lo andado hasta que llega a las puertas de la cafetería. Abre, entra, va hacia su mesa y...

Ohh, vaya, llega tarde. No sólo eso. ¿Cuántos miles de personas hay en esa pequeña parte del mundo? Muchas. ¿Por qué, de todas ellas, ha tenido que encontrarse con su periódico Miry?
- Va, llego tarde a recuperarlo -¿pedírselo para que se lo devuelva? Ni hablar. ¿Devolvérselo ella por las buenas? Lo duda. Y pasa de quedarse a discutir, claro. Bastantes de esas han tenido desde que decidió dejarla, así que prefiere ni mirarla a la cara y girarse; con un poco de suerte, ni le habrá reconocido-. Suerte con el sudoku, está a medias -y ahí es cuando él se tiene que ir por donde ha venido, otra vez. Y eso hace, dirigirse hacia la salida. ¿Por qué coño ha venido ha por el periódico y se va con las manos vacías? Tsk, siempre perdiendo el tiempo.

por **Miranda Halliwell** Dom Nov 14, 2010 11:39 pm

Pasaba las hojas una por una y cuando llegué a la sección de juegos y chistes, noté que el Sudoku estaba hecho a la mitad. Reconocí la letra casi al instante, odiaba mi memoria, oficialmente, tengo mala suerte. Los números fueron escritos por Vinz, le había visto sus notas en más de una ocasión antes que terminara conmigo, su caligrafía era fácilmente reconocible.

Alcé la vista para asegurarme de que no estuviera allí, nuevo error, Vinz estaba allí, al oírle lo del sudoku rodé los ojos, no iba a pelear por una cosa como esa, vi que se estaba yendo -¿acaso no lo quieres terminar tú?- pregunté alzando una ceja, probablemente había creído que no se lo iba a devolver, pero no podía hacer nada al respecto, él lo había comprado, quién era yo para quedármelo.

por **Vincent Hewitt** Dom Nov 14, 2010 11:49 pm

Cuando ya está a medio camino de la puerta con respecto a la mesa, escucha la voz de Miry, más cansina de lo que estaría acostumbrado a escuchar si aún estuviese acostumbrado a escucharla hablar hacia él sin sonar, digamos, hostil, preguntándole si no lo quiere terminar.

Qué remedio. Se detiene en seco, se gira, y vuelve. Parece que hoy es un día de desandar lo andado, pero en el sentido más apoteósico imaginable para la expresión.
- ¿No quieres tú el periódico? Por mí puedes quedártelo -encoge los hombros, sin mostrar ningún tipo de alteración-. Claro, que siempre me puedo quedar a terminarlo y ya cuando acabe te lo quedas.

Él es único para las excusas, y lo sabe. Como la que le acaba de marcar para quedarse allí un rato. No es que crea que vaya a querer, pero por intentarlo que no quede. Además, él no tiene nada en contra de la morena, es ella la que le odia a él.

por **Miranda Halliwell** Dom Nov 14, 2010 11:58 pm

Alcé los hombros despreocupada, -por mi está bien, termínalo, no quiero arruinarte la diversión- dije con calma para luego tomar un sorbo de mi café. Desde que él había terminado conmigo evitaba dirigirle la palabra, sabía que terminaría diciendo algo venenoso y la verdad era que no quería tener problemas con nadie, menos con él.

Cada vez que lo veía no podía evitar recordar lo bien que lo habían pasado juntos, pero con ello venían los recuerdos del término de ello. Sentí una sensación amarga, no era tristeza, quizá nostalgia, que sé yo, el punto es que esas cosas no podrían volver a revivir, ya que mis sentimientos y los de él obviamente habían cambiado de forma drástica. En más de una ocasión me había preguntado por qué habría terminado conmigo, quizá ahora que no estaba de humor para pelear podría sacarme la duda de encima.

por **Vincent Hewitt** Lun Nov 15, 2010 12:14 am

Se la queda mirando un momento, como si estuviese intentando comprobar que realmente le estaba diciendo, ella, a él, que podían sentarse a la misma mesa a hacer un sudoku como si nada y no es una ironía o algo así.

Pero no, parece que no. Así que encoge los hombros y arrastra la silla un poco hacia atrás para sentarse, coge el periódico y lo abre aleatoriamente, atinando justamente en la página de los pasatiempos.

Se saca un boli del bolsillo, exactamente el mismo que usara en su momento para empezar el sudoku, y se inclina ligeramente sobre el periódico.
Da una rápida ojeada, marca un 3 en una casilla vacía y alza los ojos, mirándola de reojo, suponiendo que para ella, cuanto antes se largue, mejor.
- No te preocupes... acabaré enseguida -ella sabe que tiene buena mano con los pasatiempos de esa clase, sí. Vuelve a bajar la mirada. Anda, mira, ahí va un 5.

por **Miranda Halliwell** Lun Nov 15, 2010 1:05 am

Me daba la impresión de que él no podía creer que no tenía ganas de discutir, solo estaba siendo educada, no podía pelear por una tontería como un Sudoku, además, no me molestaba su presencia, todavía, quizá cuando comenzara a hacer comentarios irónicos me cabrearía.

Le dí un pequeño mordisco a mi muffin, miré de reojo a Vinz, sonreí levemente, este tipo de situaciones no se daban a menudo e incluso parecían bastante ridículas. -Tómate tu tiempo...por cierto, allí hay un 9- dije señalando una de las casillas, me sorprendí de mi misma por haber dicho eso, sacudí la cabeza levemente y desvié la mirada lentamente, tomé un poco más de café. Esto de los antojos y mi estado de ánimo hacían que esto fuera aún más extraño, incluso para mí.

por **Vincent Hewitt** Lun Nov 15, 2010 2:50 am

Miry está totalmente relajada, qué cosas. Y le dice que se tome su tiempo, qué cosas. Espera, ¿realmente está sentado con quien cree estar sentado?

Vaaya. Da la sensación de que se ha producido algún tipo de alto al fuego. Asiente ligeramente y cuando le da ese 9 y lo anota, gracias al mismo le salen un 8, un 6, un 3 y dos 1.
- Vaya... gracias -levanta la cabeza y la mira mientras lo dice. No es muy suyo lo de dar las gracias. Y tampoco lo de estar hablando como si nada con una tía que se supone que le odia por eso de haberla dejado en la estaca a merced del enamoradizo de su hermano, y tal.

Qué situación más rara. Hacer un sudoku en las narices de su ex, que le espera para poder quedarse con el periódico. Suena casi cómico.
Tiene la sensación de querer establecer alguna clase de conversación pero no acaba de salirle la vena, así que vuelve a agachar la cabeza y pinta un 4, un 6 y un 8. Ya tiene un cuadro completo. ¡Bien! Faltan ocho e_e

por **Miranda Halliwell** Lun Nov 15, 2010 3:01 am

Cuando me dio las gracias me quedé un tanto sorprendida, sabía lo mucho que le costaba dar las gracias por algo. Que situación más cómica, era como para que mi hermano se partiera de la risa, probablemente él es el causante de todo esto, aunque no tiene mucha lógica, probablemente rezó para que una cosa así me pasara, pero bueno, después me las arreglaría con él.

Miré a Vinz, no le quedaba mucho del juego, solo le quedaban unas cuántas casillas para concluir. -¿Hice algo mal?- pregunté de la nada, desvié nuevamente la mirada, quería saber por qué había terminado conmigo, nunca me dio una explicación, incluso me hubiera bastado un "ya no te quiero" o algo así para dejarme algo tranquila, quizá de allí nació el rencor que sentía hacia él, no hubo motivos, o si los hubo, no los dijo. -¿Qué hice para que lo nuestro terminara?- pregunté con algo más de claridad, antes de tomar lo poco que me quedaba de mi café.

por **Vincent Hewitt** Lun Nov 15, 2010 3:59 am

Bueno, completado el primer recuadro, seguir hasta terminar no va a ser demasiado complicado. Dos cifras más para el de al lado, una para el de encima... ¿Qué le quedan, ocho casillas por rellenar para acabarlo?
Bah, hoy en día llaman "Difícil" a cualquier cosa.

Y hablando de difícil... De pronto, sin venir a cuento, de buenas a primeras, me hace... esas dos preguntas. "De pronto, sin venir a cuento, de buenas a primeras". ¿No es así como ella definió la forma en que la dejó? Bueno, a ojos del mundo parece que es así. Luego tal vez no sea tan sencillo, pero... Bah, como sea.

Marca un 2. Luego un 3. Allí un 7, y allí un 6. Y levanta la mirada, clavándola en ella, manteniéndose en silencio, sin alterar demasiado su expresión. No es que Vinz sea alguien que se caracterice precisamente por tratar temas así, lo que él llama "de despecho", y todo eso.
- Fiuu... vaya, esto me pasa por volver a por el periódico -no, Vinz, las coñas no te van a servir esta vez. Está de buenas. No hay bronca que valga.

Suspira y baja un poco la cabeza, desviando la mirada.
- No hiciste nada mal -confiesa. Le cuesta. Él no es de hablar de esas cosas, y lo sabe. Ambos lo saben-. Absolutamente nada -y ese es el problema. Chasquea la lengua y anota un par de números más. Le falta una casilla. Sabe que ahí va un 5, pero no parece ir a ponerlo de inmediato.

por **Miranda Halliwell** Lun Nov 15, 2010 2:22 pm

No me respondió al instante, ya que vi como completaba un par de números más, le quedaban poquísimos. Su mirada se clavó en la mía repentinamente, no aparté la vista, quería que me dijera la verdad, por mucho que esta doliera u ofendiera.

Al oír su primer comentario entrecerré los ojos, él sabía lo mucho que me molestaban esa clase de cosas cargadas de ironía. Él apartó la mirada cuando agachó su cabeza, "¿nada?" pensé extrañada, de mis labios no salió ni una sola palabra, en cambio, mi rostro formó una expresión que en palabras se podría interpretar fácilmente un "¿a que te refieres?". Si yo no había hecho nada para que lo nuestro terminara, entonces, ¿qué fue?. Miré el sudoku disimuladamente, solo le quedaba un 5, pero al parecer Vinz no quería colocarlo aún.

por **Vincent Hewitt** Miér Nov 17, 2010 1:55 pm

Sí, la mirada de Miry se lo dice todo. Incomprensión, confusión... lo de siempre. Búsqueda de respuestas que no se tienen. Así vive la maldita raza humana, intentando resolverse las dudas que tienen los unos a los otros para poder, algún día, morirse tranquilos.

Y, por supuesto, tiene que extrañarle que sea tan escueto con su respuesta, que no ironice, que simplemente deje las cosas en el aire. Eso no va mucho con él, ¿no es cierto? Lo mismo la culpa es de la rubia, que le pone las neuronas patas arriba. No acaba de captar qué le pasa exactamente, pero le da la sensación de que él no ha nacido para salir con la pelirroja.

Lanza un suspiro al aire. Cuánto más se "acerca" a la rubia, a Ari, más sensación le da de que se está ablandando con los demás. De que dice cosas que en sus cabales, que en su sano juicio, no diría.
De un modo u otro, sabe que Miry y Alex seguirán ahí, pinchándole, hasta que escupa la maldita respuesta. Ahora, al menos, parece estar de buenas.

Agacha el bolígrafo sobre el papel y pinta algo en el recuadro que falta. No es un 5, es una línea. La primera línea del 5. Se lo va a tomar con calma, pero se queda mirando el periódico. Si realmente va a hablar de eso, no es que le apetezca mucho mirarla a la cara. Él no es de eso.
- Tenía miedo -susurra, sus palabras le salen cargadas de la garganta, como reacias a ser pronunciadas por las cuerdas vocales de alguien como él-. De enamorarme.

Cuatro palabras, vagas, cargadas, que no deberían haber salido nunca de él, pero supone que siendo cómo es él, lo entenderá. Lo que no entiende es que parece ir camino de algo parecido con otra persona... Y no se ve muy capaz de pararlo, en esta ocasión.

por **Miranda Halliwell** Miér Nov 17, 2010 2:09 pm

Vi como escribía la primera linea del cinco, al parecer, ni él ni yo queríamos terminar la conversación. Quería saber la verdad, yo creía que había hecho algo mal para que lo nuestro terminara y si quería enamorarme de nuevo no quería cometer el mismo error; pero sus palabras me habían dejado sumamente confundida y no entendía nada.

Él no me miró cuando habló, su mirada estaba clavada en el papel de diario, sabía que ese tema no era el favorito de Vinz y quizá por eso le perdoné el hecho de que ni siquiera me mirara, ya que eso me enerva de una forma increíble.

Al oír su respuesta, alcé ambas cejas incrédula. Era la primera vez que escuchaba a alguien decir que le daba miedo enamorarse, era un tanto extraño y no lograba entender bien el motivo. Guardé silencio pensando en aquellas palabras que a decir verdad resolvían la mayoría de mis preguntas, apoyé mi codo en la mesa para luego dejar mi barbilla sobre la palma de mi mano, mi mirada estaba clavada en la mesa, un tanto perdida, como si mirara al infinito.

por **Vincent Hewitt** Miér Nov 17, 2010 3:14 pm

Ella sabe cómo es él, de sobra. Sabe que cuando empezaron a salir fue más algo impulsivo, pasional, que un hecho meramente romántico. Tiene que saber que él nunca ha hecho nada con fines románticos... Y el problema radica en que parece estar cada vez más cerca de hacerlo. Él, el fiestero y desmadrado de Vinz... enamorándose. Eso es lo que quiso evitar. La razón por la que la dejó. Porque temía que si seguía así se enamoraría de ella...

¿Lo más curioso? Cómo se desencadena todo esto. El hecho de que no la dejase por el simple hecho de enamorarse, sino por el de hacerlo con la persona... equivocada.

Sacude la cabeza. Esto no le puede estar pasando a él. Miry se ha callado. Normal. Supone que ahora es cuando tiene que salir de ahí, ahora que puede, que a saber cómo va a reaccionar la morena. Lo mismo se le tira encima y se lo carga por inútil; las tías son mucho de eso, de llamarles inútiles cuando no actúan consecuentemente con esos temas a juicio de ellas.

Niega con la cabeza ligeramente, baja la mano de nuevo, dos trazos más, y ha terminado ese cinco. Cierra el boli y, como se da la casualidad de que también aborrece enormemente los silencios incómodos, pone un dedo sobre el periódico, lo desliza sobre la mesa hacia ella y suspira.
- Todo tuyo -y como ya ha terminado y ella no parece querer seguir dando coba al asunto, arrastra la silla hacia atrás. Lo que se hace antes de levantarse y marcharse, vamos.

por **Miranda Halliwell** Miér Nov 17, 2010 3:44 pm

Salí de mi trance cuando deslizó el diario, noté que había escrito el cinco que le faltaba. Cuando alcé la vista, vi que el ya estaba en la puerta de la cafetería, "genial, sencillamente genial" pensé negando con la cabeza. Tenía dos opciones, la primera era quedarme allí con las ganas de terminar con mis dudas y la otra era seguirlo, por muy melodramático que fuera.

Solté un suave bufido, no sabía si me arrepentiría de eso, pero no me gustaba quedarme con la pregunta "y si..." en la cabeza, así que me levanté rápidamente dejando una propina en la mesa, olvidándome totalmente del periódico.

Vinz no estaba muy lejos del café, lo alcancé a paso rápido, -una persona normal dice adiós o algo por el estilo- dije con calma, regulando mi paso al suyo, quedando junto a él. Le miré unos instantes, -que hay de Caroline, cuando sientas que te enamoras de ella, ¿la vas a dejar también?- pregunté, Caroline era mi amiga a pesar de todas las cosas que pudieron haber causado un distanciamiento, no quería que le hicieran daño, aunque tenía sumamente claro que ella no lo estaba tomando tan en serio como lo había hecho yo, quizá ese fue mi error.

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